Esta mañana me he reunido con Rajoy en la Moncloa. Una reunión cordial, si bien sólo hemos estado de acuerdo en que hoy llovía. Y es que la posición del PP y su actitud ante los problemas que sufren los españoles nos parece un error. La principal división no es entre Cataluña y España sino entre ricos y pobres, entre corruptos y gente trabajadora, entre la gente sencilla y los vividores de rentas y sobres. Y no vamos a participar en ningún teatro que enfrente a las clases populares de Cataluña y España, porque sufrimos como hermanos los desahucios, el paro y la corrupción que provoca la oligarquía y sus partidos. Se envuelvan en la bandera que se envuelvan, los de Bárcenas y los del 3% no son como nosotros. Además, los problemas se resuelven haciendo política y no en los tribunales ni imponiendo la independencia incluso sin votos suficientes. Nuestra apuesta es clara: diálogo, responsabilidad y modelo federal al servicio de las clases populares.