Ayer registramos en el Congreso una pregunta que le hago llegar al Gobierno. Se trata de las remuneraciones que reciben los directivos del Banco de España, que son totalmente ópacas para la sociedad. Siendo una entidad de gran trascendencia y, además, de naturaleza pública (pero relativamente independiente) considero que es intolerable la total falta de transparencia. Con objeto de que el Gobierno se posicione, hemos hecho llegar la siguiente pregunta:

¿Piensa el Gobierno recomendar al Banco de España que informe adecuadamente y con la publicidad y transparencia necesarias de dichos incentivos y gratificaciones?

En la siguiente nota de prensa argumentamos las razones de esta pregunta, aunque son más que evidentes.

(Madrid, 20 de enero 2011).- El diputado de Izquierda Unida y portavoz parlamentario en las comisiones de Economía y Hacienda del Congreso, Alberto Garzón, ha registrado una iniciativa por la que reclama al Gobierno que detalle si “tiene intención de recomendar al Banco de España que facilite a partir de ahora toda la información necesaria sobre los incentivos y gratificaciones que reciben sus empleados y, sobre todo sus altos cargos”.

En concreto, la pregunta por escrito registrada señala textualmente si “¿Piensa el Gobierno recomendar al Banco de España que informe adecuadamente y con la publicidad y transparencia necesarias de dichos incentivos y gratificaciones?”

Garzón lleva a cabo esta iniciativa después de que el Tribunal Supremo dictaminara recientemente que el Banco de España deberá informar a los representantes de los trabajadores acerca de las cifras globales de estos incentivos y gratificaciones, además del número exacto de personas que reciben dichos incentivos, especificando también el sexo de los beneficiarios para hacer cumplir cuando fuese preciso los preceptos básicos de igualdad de trato y oportunidades entre varones y mujeres.

El parlamentario de IU por Málaga recuerda que la falta de transparencia de la máxima entidad monetaria española sobre esta cuestión “se arrastra desgraciadamente en el tiempo de forma histórica”, habiendo llegado a recurrir –y perder judicialmente, ya que el recurso fue desestimado- la decisión adopta por la Audiencia Nacional en 2010 de reconocer el derecho que tenía un sindicato a que le fuera entregada este tipo de información.

Alberto Garzón valora que resulta “relevante comprobar las resistencias del Banco de España, el supervisor del sistema bancario español, a la hora de informar e introducir transparencia en su política retributiva en forma de incentivos, premios o gratificaciones. Esta cuestión es hoy importante simplemente considerando los escándalos retributivos que hemos conocido en distintas entidades financieras, algunas de ellas incluso intervenidas por el propio Banco de España”.

Por este motivo, completa sus pregunta al Ejecutivo del PP interrogando sobre “¿Qué opinión le merece al Gobierno las resistencias del Banco de España para informar y hacer transparentes los incentivos y gratificaciones que entrega a sus empleados y altos cargos?”